19.3.12

SACHER


Una receta ideal para un día como hoy, una tarta Sacher, para todos los padres amantes del chocolate, un detalle hecho con mucho cariño. Si queréis acompañar vuestro regalo con un buen postre o si queréis regalarle a vuestro padre algo dulce, aquí tenéis la receta perfecta.
Empezamos!



Para el bizcocho:
80 gr. De chocolate para fundir
4 yemas
60 gr. De mantequilla
60 gr. De azúcar glass
100 gr. De harina
5 gr. De levadura
3 claras
60 gr. De azúcar
Mantequilla para engrasar el molde
Para el relleno:
Mermelada de albaricoque, melocotón, fresa o naranja (al gusto)
Para el relleno 2:
200 gr. De nata líquida
75 gr. De cacao en polvo

Para hacer el bizcocho:
Fundir los 80 gramos de chocolate, introducirlos en un bol y mezclarlos con los 60 gr. De mantequilla pomada (a temperatura ambiente) y el azúcar glas. Remover bien, incorporar las yemas y continuar batiendo.
Aparte, batir las claras, añadiendo poco a poco el azúcar, hasta obtener un merengue consistente.
Unir el merengue a la mezcla anterior. A continuación, incorporar la harina y la levadura con suavidad. Una vez mezclado, rellenar un molde previamente engrasado con mantequilla y hornear a 170 º C durante unos 40 minutos aproximadamente.
Una vez hecho, desmoldar y dejar enfriar.
Para el relleno 2, montamos la nata y cuando esté casi montada, le añadimos el cacao poco a poco. Conseguiremos la típica trufa que rellena los brazos de gitano y los profiteroles.
Una vez esté listo el bizcocho le hacemos un par de cortes horizontales, con el propósito de conseguir tres planchas de un cm más a menos, según el tamaño de nuestro molde.
Ponemos en un plato la primera capa de bizcocho la untamos con la mermelada de albaricoque, colocamos la segunda capa de bizcocho y la untamos con la nata trufada, y colocamos la última capa de bizcocho. Y lo metemos en el congelador para que coja consistencia.
Ponemos el chocolate para la cobertura al baño maría y cuando esté totalmente desecho, lo dejamos enfriar un poco y lo distribuimos por encima del bizcocho, cubrimos toda la superficie. Debemos hacerlo sobre una rejilla, para que caiga el exceso de chocolate. Lo dejamos enfriar en la nevera hasta un poco antes del momento de servir.


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